CARACTERÍSTICAS GENERALES
1. La agricultura como sector prioritario.
2. Visión no estática de la riqueza: el concepto de producto neto.
3. Influencia en el liberalismo: la aparición del “Laissez faire, laissez passer”, principio básico del liberalismo económico de Adam Smith.
4. La industria, el comercio y las finanzas como sectores estériles.
La fisiocracia era una escuela de pensamiento económico del siglo XVIII fundada por François Quesnay y Anne Robert Jacques Turgot en Francia. Afirmaba la existencia de una ley natural por la cual el buen funcionamiento del sistema económico estaría asegurado sin la intervención del gobierno. Su doctrina queda resumida en la expresión “laissez faire, laissez passer” (dejar hacer, dejar pasar).
El origen del término fisiocracia proviene del griego y quiere decir "gobierno de la naturaleza", al considerar los fisiócratas que las leyes humanas debían estar en armonía con las leyes de la naturaleza. Esto está relacionado con la idea de que sólo en las actividades agrícolas la naturaleza posibilita que el producto obtenido sea mayor que los insumos utilizados en la producción surgiendo así un excedente económico. Los fisiócratas calificaron de estériles las actividades como la manufactura o el comercio donde la incautación sería suficiente para reponer los insumos utilizados.
La fisiocracia surge como una reacción de tipo intelectual a la común concepción de la vida intervencionista del pensamiento mercantilista. Y para ahondar más las diferencias, estudiaron los fondos, por lo que propugnaban el impuesto único sobre la tierra y sugerían la anulación de todos los establecidos por los mercantilistas. La tendencia general de los fisiócratas es el libre cambio. La tarea del economista se reduce a descubrir el juego de las leyes naturales. La intervención del estado es inútil, pues no haría otra cosa que interferir ese orden esencial. El interés de los fisiócratas se concentraba en gran medida en la definición de una estrategia macroeconómica de desarrollo que incluyera políticas coherentes.
Para los fisiócratas, en oposición al mercantilismo, la riqueza de una nación procedía de su capacidad de producción y no de las riquezas acumuladas por el comercio internacional. Y consideraban que la única actividad generadora de riqueza para las naciones era la agricultura.
Los fisiócratas asumieron que dada su observación de los mercados, la manufactura era una actividad estéril. Obviamente, esto se debía al tamaño de la industria de entonces, anterior a la revolución industrial. Lo cual constituye un fallo en su análisis, que se deriva también del mayor interés en la productividad física y no en la productividad del valor. También defendían que la agricultura era el único sector productivo capaz de crear riqueza, mientras que el comercio y la industria tan sólo permitían la distribución de esta riqueza; los fisiócratas estaban en contra de las políticas de comercio internacional mercantilistas, favorecedoras del proteccionismo.
La fisiocracia se va a comportar como un grupo homogéneo. Se les llamara con el tiempo “la secta fisiócrata” y debido a su organización constituyeron un lobby de presión en la Corte francesa.
PRINCIPALES AUTORES
François Quesnay (1694-1774):
Economista francés, creador de la escuela fisiocrática (Méré, Île-de-France, 1694 - París, 1774). Tras formarse de manera tardía y autodidacta, François Quesnay llegó a hacerse cirujano en 1718; luchó contra las especulaciones propias de la medicina de la época y adquirió el suficiente prestigio como para convertirse en secretario de la Academia de Cirugía (1737) y médico de la corte de Luis XV (1752). Recibió la protección de la amante del rey, Madamme de Pompadour, que le ayudó a ganarse la confianza real como consejero.
Con más de sesenta años empezó François Quesnay a interesarse por la economía, a raíz de la obra de Mirabeau, El amigo de los hombres; del encuentro de ambos en 1757 nació la escuela economista o fisiocrática, que adoptó la forma de una secta elitista con Quesnay como maestro supremo y un reducido número de discípulos fieles (Mirabeau, Dupont de Nemours, Mercier de la Rivière, Baudeau...).
Los fisiócratas mantuvieron contactos con otros pensadores de tendencia ilustrada, como los enciclopedistas Diderot y D’Alembert (que permitieron a Quesnay redactar los artículos sobre «Granos» y «Agricultores» de su Enciclopedia) o la llamada «escuela de Gournay», a la cual pertenecía Turgot (el único del grupo que llegó a ejercer el poder en Francia, poniendo en práctica algunas ideas fisiocráticas).
La doctrina esencial de la fisiocracia se encuentra recogida en el Tableau économique (cuadro económico) que Quesnay elaboró en 1758, modificándolo y perfeccionándolo en múltiples ediciones posteriores. Se trataba de un modelo de reproducción económica que analizaba la circulación de la renta en una sociedad dividida en tres clases: agricultores, propietarios y los demás, a los que caracterizaba como clase estéril.
La agricultura era, en aquella teoría, la única actividad realmente productiva, de la que dependían todas las demás. En consecuencia, había que fomentar un desarrollo económico basado en una agricultura altamente capitalizada y tecnificada; y para ello propuso (en sus Máximas generales del gobierno económico de un reino agrícola, 1760) una política económica liberal: libertad de precios y de mercado, libertad de empresa y de cultivos, libertad de circulación y de comercio, reducción de las barreras aduaneras, simplificación del sistema tributario reduciéndolo a un único impuesto sobre la renta de la tierra.
Curiosamente, ese liberalismo económico iba unido a una preferencia política por el despotismo monárquico, un despotismo ilustrado: la mejor garantía de acierto en el gobierno sería una esmerada educación del príncipe, que le hiciera capaz de descubrir con las luces de la razón el orden natural del universo; la política económica correcta consistiría en dejar actuar sin interferencias a ese orden natural.
Quesnay estaba fascinado por el modelo de empresarios agrícolas ricos e innovadores del norte de Francia y de los Países Bajos, y aspiraba a extender ese modelo a todo el país; sin embargo, para ello era necesario desmontar primero el entramado de regulaciones económicas heredadas de la época mercantilista. Su crítica al mercantilismo y al modelo económico intervencionista del Antiguo Régimen sentó las bases de la economía política liberal (que se desarrolló en Gran Bretaña a partir de Adam Smith) y ejerció una gran influencia en la época de la Revolución francesa (1789).
Jacques Turgot (1727-1781):
Jacques Turgot, Baron de l'Aulne fue un conocido político y economista francés del siglo XVIII. Contemporáneo, amigo y protector de Quesnay y los fisiócratas, aunque manteniendo ideas originales. Estudió en la Sorbona y ocupó importantes puestos administrativos y políticos, llegando a ser Ministro de Finanzas bajo Luis XVI.
Decidido defensor de la libertad de comercio, Turgot era enemigo de los gremios y reformista, pero poco partidario de la intervención gubernamental. Mientras estuvo en el ministerio, nombró responsable de la casa de la moneda a su amigo Condorcet, tratando de restringir los gastos del estado.
Se considera que tuvo gran influencia sobre Adam Smith, quién le visitó asiduamente durante su estancia en Francia.
Comerciante de origen que se convirtió en funcionario con Luis XV, y en ministro de Hacienda con Luis XVI. Estuvo vinculado a la reforma de la agricultura.
v Lettre a l'abbé de Cice (sur le Papier-Monnaie), 1749
v Tableau philosophique des progrés successifs de l'esprit humain, 1750.
v Plan de deux Discours sur l'Histoire Universelle, 1751.
v Plan d'un ouvrage sur la geographie politique, 1751.
v Fragmens et pensees detachees pour servir a l'ouvrage sur la geographie politique, 1751.
v Articles in Diderot's Encyclopaedia, 1757 - "Etymologie", "Foire et Marchés", "Fondation", "Langues".
v "Éloge de Vincent de Gournay", 1759, Mercure.
v Le Commerce des grains: Projet de lettre au contrôleur général Bertin sur un projet d'édit, 1763.
v Reflections on the Formation and Distribution of Riches, 1766
v L'Impôt Indirect: Observations sur le mémoires récompensés par la Société d'Agriculture de Limoges, 1768.
v Valeurs et Monnaie: Projet d'article, 1769
v Mémoire sur les prîts d'argent, 1770.
v Lettres au Contrôleur général (abbé Terray) sur le commerce de grains, 1770.
v Lettre au Contrôleur général sur la marque des fers, 1773.
v Letters to DuPont de Nemours.
Pierre du Pont de Nemours (1738-1817):
Fue un empresario y economista francés. Muy relacionado con François Quesnay, elaboraron conjuntamente varias obras, entre las que hay que destacar La Fisiocracia (1768). Sustituyó oficialmente al abad Nicolás Baudeau en la dirección de las Efemérides del ciudadano en 1769.
Trabó amistad con Turgot, quien le llamó durante su época de ministro de finanzas, y compartió con él su caída en desgracia en ese ministerio, aunque luego fue llamado de nuevo por Vergennes, y fue uno de los redactores del Tratado de Versalles de 1783, que acabó con la guerra de independencia de los Estados Unidos. Allí conocerá a Thomas Jefferson quien le ayudará en su traslado a los Estados Unidos. Para agradecerle la labor prestada, el rey Luis XVI de Francia le concedió una patente de nobleza y le permitió añadir de Nemours a su apellido original du Pont.
Diputado en 1789 en los Estados Generales por el distrito de Nemours, fue primero partidario de la Revolución francesa, y ejerció en 1790 de presidente de la Asamblea Nacional Constituyente. Votó a favor de las más importantes reformas, pero tuvo que sufrir las iras del pueblo al mostrarse contrario a la creación de los assignats y de haber manifestado su apoyo al rey.
Junto a su hijo Eleuthère Irénée du Pont se cuenta entre los que defendieron físicamente a Luis XVI y a Maria Antonieta de las turbas que asaltaban el Palacio de las Tullerías de París durante las revueltas del 10 de agosto de 1792. Fue condenado a la guillotina durante el Terror pero al no haberse producido su ejecución cuando cae Robespierre el 9 Termidor, fue liberado. Se casó con Françoise Robin el 5 Vendimiario del año IV (27 de septiembre de 1795).
Después de que su casa fuera saqueada en el año V (1797) durante los acontecimientos del 18 Fructidor, él y su familia se exiliaron a los Estados Unidos en el año VII (1799).
Pierre du Pont de Nemours mantuvo fuertes vínculos con la industria y el gobierno de los Estados Unidos, en especial con Thomas Jefferson. A su regreso a Francia en la época del Directorio, formó parte del Consejo de los Quinientos. En 1802, se dedicó a la diplomacia entre Francia y los Estados Unidos, durante el reinado de Napoleón.
Es uno de los responsables de la compra de Luisiana por los Estados Unidos en 1803, con un compromiso que quería evitar conflictos entre las poblaciones francesa y americanas que residían en el territorio, pero que sirvió fundamentalmente para volver a proporcionar a Napoleón medios para reconstruir una flota capaz de luchar contra Inglaterra en Europa. En 1814 fue nombrado secretario del gobierno provisional. Al ser partidario del exilio de Napoleón en la isla de Elba en 1814, tiene que volver a exiliarse a los Estados Unidos durante el Imperio de los Cien Días, por el regreso de Napoleón.
Pierre du Pont de Nemours ha dejado una gran cantidad de obras sobre economía, política, fisiología, historia natural y física general (La fisiocracia, La filosofía del bienestar, Memorias sobre los animales, una traducción en verso del Orlando furioso e interesantes memorias sobre Turgot. También redactó durante algún tiempo el Diario de agricultura. Había sido miembro del Instituto de Francia desde su fundación.
Gran difusor de:
v Cartillas rurales
v La prensa agrícola
v Los calendarios
v La previsiones (meteorológicas, etc.)
ANÁLISIS DE INPUT-OUTPUT
W. Leontief (1957): “INPUT-OUTPUT ANALYSIS”, en “Enciclopedia Internacional de las Ciencias Sociales”, Ed. Aguilar, Vol. 6, pp. 70-78
v “...el método INPUT-OUTPUT es una adaptación de la teoría neoclásica del equilibrio general al estudio empírico de la interdependencia cuantitativa entre actividades económicas interrelacionadas”.
v La tabla input-output, soporte estadístico del modelo, “...describe el flujo de bienes y servicios entre los distintos sectores de la economía nacional durante un periodo fijado de tiempo”.
PROPÓSITO: Analizar y cuantificar las relaciones derivadas de esos flujos mediante:
v Sistemas de ecuaciones lineales (sencillo, pero irreal).
v Coeficientes numéricos no estimados estadísticamente (ratios descriptivos en la TIO). Rasmussen (1963): “sorprendente”.
CRITICADO POR SU SENCILLEZ:
v “forma heroica de construir modelos (R. Stone y G. Croft-Murray, (1959).
ALABADO POR SU APLICABILIDAD Y CARÁCTER EMPÍRICO:
v “regla de tres del economista” (E. Dossier, 1980)
ORIGENES
CONCEPTUALES: (Shumpeter, 1971 y Nagels, 1970):
v Mercantilismo y fisiócratas à representación esquemática del circuito económico (Boisguilbert – Quesnay – Marx – Walras).
FOMARLES:
v Primer balance económico soviético à idea explicita de una TIO, alabada por Leontief (1963, p. 130. Articulo en Etudes Economiques, núm. 143, traducido del original en ruso de 1925). Ver Nemchinov, 1963 y 1973; Dmitriev, 1968.
v “request - table” de R. Frish (1934. p.272). Ver Morillas (1983; p. 91) y Rasmussen (1963, p. 25).
ÍNDICE
Características generales.
Estamentos privilegiados: La nobleza.
Estamentos privilegiados: El clero.
Los no privilegiados: Estado llano (ciudad y campo)
La movilidad social.
Importancia de las redes, dada la existente visión estática de la sociedad.
CARACTERÍSTICAS GENERALES
v Sociedad estamental: nobleza, clero y estamento llano (pueblo llano / pecheros).
v Importancia del privilegio, lo cual marcaba las pautas de desigualdad social.
v Sociedad corporativa: familia, linajes, asociaciones profesionales, etc. Es una sociedad comunitaria antes que individualista.
v Importancia de las redes sociales.
La sociedad del Antiguo Régimen estaba dividida, según el derecho tradicional, en tres órdenes o estamentos: la nobleza, el clero y el estado llano, que comprendía grupos tan diversos como el campesinado, la burguesía y las clases populares de las ciudades y cuya función social era producir todos los bienes materiales que la ciudad necesitaba.
La característica principal de la sociedad estamental era su desigualdad civil. Esta desigualdad comportaba la división en dos grupos bien diferenciados: los privilegiados: nobleza y clero, éstos gozaban de derechos y privilegios y estaban exentos de pagar impuestos; y los no privilegiados: tercer estado o estamento, que no tenían privilegios y debían soportar todas las cargas fiscales.
LOS PRIVILEGIADOS
Los estamentos privilegiados eran la nobleza y el clero. Tenían una serie de ventajas sobre el resto de la población:
v No pagaban impuestos.
v Poseían la mayor parte de las tierras.
v Tenían tribunales propios y acaparaban los principales cargos.
LA NOBLEZA:
La nobleza tenía la función teórica de defender la sociedad y era el núcleo fundamental de la clase dominante. Sin embargo, en la Edad Moderna muchos nobles evitaban servir en el ejército y la imagen del noble-guerrero era cada vez más infrecuente. Sus efectivos eran escasos y constituían entre el 2 y el 3% de la población. La base de su riqueza era la propiedad territorial y en conjunto poseía entre el 30 y el 40% de las tierras (en España). Gozaba, asimismo, de una serie de concesiones.
Honoríficas:
v Derecho a llevar espada.
v Banco reservado en la iglesia.
v El monopolio de acceso a altos cargos.
v No podían ser azotados ni ahorcados.
Económicas:
v Derecho de caza.
v Exención de trabajar en las obras públicas.
Fiscales:
v Dispensa de pagar impuestos.
v No obstante, derecho a cobrarlos.
Ahora bien, tampoco era un grupo homogéneo y existían enormes diferencias entre la rica y poderosa nobleza de la Corte y la nobleza de provincias. No conforme con esta distinción a grandes rasgos, profundizando podemos distinguir otra serie de diferencias que convertían la nobleza en un grupo heterogéneo, en el cual podemos distinguir tres grandes grupos:
Ø El nivel más alto de la nobleza correspondía a los títulos:
ü Duques.
ü Condes.
ü Marqueses.
ü Etc.
A este nivel la nobleza poseía un enorme poder político y económico y mantenían un estilo de vida muy lujoso. Entre los títulos había un reducido grupo muy próximo al rey, que formaba la élite nobiliaria y que en España se llamaban “grandes” y en Francia “pares”.
Ø El nivel medio era el de los caballeros, muy influyentes en las zonas rurales. Poseían tierras de las que obtenían sus ingresos. Tenían un nivel de vida alto y se mostraban orgullosos de su posición.
Ø El nivel más bajo lo ocupaban los hidalgos, cuyas costumbres marcaron el tono de la época. Su alta estima y el fuerte sentido del honor constituyeron el asombro de cuantos extranjeros visitaban los reinos españoles. Los hidalgos eran nobles por su ascendencia familiar, pero que, en general, no tenían dinero ni posesiones. Muchos de ellos vivían en la pobreza.
Ø A lo largo de la Edad Moderna se creo otro grupo, la nobleza de toga, compuesta por juristas y otros funcionarios de la administración, a los que el rey ennobleció como premio a sus servicios al Estado y a la lealtad probada, a veces, esta se lograba a través de tres generaciones de favor y obediencia. Parte de la “movilidad social”, de la que fueron protagonistas muchas familias burguesas, viene dada por este canon de comportamiento, de tal forma que muchos de los hijos de los burgueses eran enviados a la universidad, con objeto de estudiar derecho, para ser posteriormente enviados a la Corte.
EL CLERO:
La función del clero era procurar la salvación de las almas, por medio de la oración, la predicación, los oficios religiosos y la entrega de los sacramentos. Existían dos tipos de clero: el regular y el secular. El clero regular era el que seguía la regla (conjunto de normas fundamentales que sigue una orden religiosa) de una orden religiosa, como los franciscanos, los dominicos, los jerónimos, etc. El clero secular no seguía una regla, y ejercía las labores sacerdotales. A pesar de su aparente unidad, el clero no era un grupo homogéneo si no que se podía distinguir entre el alto clero y el bajo clero:
q El alto clero: eran los cardenales, obispos, arzobispos, canónigos y altos cargos; además eran personas que provenían exclusivamente de las clases nobiliarias y vivían en el lujo característico de la nobleza, gozando de todos sus privilegios.
q El clero medio: eran los abades y abadesas de las ordenes, los miembro de los cabildos, los curas de parroquias ricas, etc. Sus cargos les daban unas rentas altas y vivían con desahogo.
q El bajo clero: eran los curas, frailes y monjas. Éstos eran sobre todo gentes de origen humilde y tenían una vida modesta, sin lujos ni privilegios.
LOS NO PRIVILEGIADOS
También llamado tercer estamento estaba representado por la inmensa mayoría de la población (entre un 90 y 95% ) y agrupaba sectores sociales muy diferentes, tanto por su condición económica como social. a pesar de esa diversidad, al final del Antiguo Régimen los unía un interés común: su posición a los privilegios sociales y al mantenimiento del régimen feudal, así como la reivindicación de la igualdad civil.
En esencia, se pueden distinguir tres grandes grupos entre los no privilegiados: la burguesía, las clases populares y los campesinos.
LA BURGUESÍA:
La burguesía constituía la clase predominante dentro del tercer estado, y era el grupo económico más dinámico de toda la sociedad, ya que, en los últimos siglos, su riqueza había aumentado notoriamente. Esto dio lugar, a que los mas ricos imitaran a la nobleza y vivieran con mucho lujo; del mismo modo, con objeto de ennoblecerse legítimamente, casaban a sus hijos en matrimonios de conveniencia con nobles que tenían problemas económicos.
Dentro del conjunto de la burguesía se podía diferenciar entre la burguesía rentista, que vivía de las rentas de sus propiedades o capitales; la financiera (banqueros y cobradores de impuestos); la manufacturera o industrial y, finalmente, la pequeña burguesía, que comprendía artesanos, pequeños comerciantes y profesionales liberales.
LAS CLASES POPULARES URBANAS:
Éstas agrupaban una multitud de trabajadores manuales de las ciudades, a quienes los burgueses denominaban desdeñosamente con el termino de “pueblo bajo”. Englobaba tanto a los artesanos (oficiales y aprendices) como a los obreros de las manufacturas, al personal doméstico y a todos los pequeños oficios de las ciudades. Durante el siglo XVIII sus condiciones de vida habían empeorado como consecuencia del aumento de la población urbana y de la subida de los precios (ver gráfico).
EL CAMPESINADO:
Era el grupo más numeroso de la población del Antiguo Régimen, más del 80% de la población eran campesinos, que alternaban las labores del campo con otros trabajos en los meses de inactividad agraria. Así, por ejemplo, de los 23 a 25 millones de habitantes que debía tener Francia en 1789, 20 millones eran campesinos. La condición de esta población era muy variada, en función de la situación jurídica de las personas y del reparto de la propiedad, lo que nos lleva en primer lugar a distinguir entre siervos y campesinos libres.
LOS CAMPESINOS LIBRES:
Estos podían ser arrendatarios o propietarios de tierras. Sin embargo, la mayoría de ellos no disponía de propiedades y sus condiciones de vida eran muy duras, empeorando con la subida de los precios del siglo XVIII, que les dificultaba todavía más la subsistencia (ver texto). Por otro lado, sobre ellos recaía la mayoría de los impuestos: reales, eclesiásticos, señoriales... Ante esta situación, la abolición de las estructuras feudales era una reivindicación unánime del campesinado del Antiguo Régimen.